Mensajepor El padrino » Sab Jul 19, 2008 3:14 pm
Tracción a las cuatro ruedas y una masa quizá demasiado elevada para estos menesteres pueden no ser una buena combinación para el drifting, pero como demuestra el piloto que conduce este Porsche Cayenne GTS en el circuito de Pastoriza de Lugo, todo es ponerle ganas, darle al gas y y unos cuantos volantazos.
El chirriar de sus cuatro ruedas al unísono es realmente ensordecedor y cuando toma las enlazadas, demuestra una agilidad inesperada para un coche de estas dimensiones, para que vamos a negarlo. Impresionante, en pocas palabras. Y divertido para terminar de fundir los neumáticos que tienes para cambiar. Habrá que ir mirando con otros ojos al Porsche Cayenne GTS, porque ese V8 4.8 puede dar mucho juego aunque esté embutido en un coche de apariencia tan pesada.
Perserverancia y determinación son las dos claves del éxito.
Week Song:
Ken Jones-Only when I laugh